
El Trabuquete es una espectacular poza enclavada entre paredes rocosas en La Vera. Todo un premio en una ruta en La Vera que es todo un clásico del senderismo. En verano ideal para bañarse en uno de los charcos imprescindibles de Extremadura y siempre un paraje impresionante tras una caminata de no más de hora y media.
Consejos para ir al Trabuquete
Eso sí, por un sendero pedregoso que dificulta la marcha y varios repechos a lo largo de unos tres kilómetros hasta llegar al Trabuquete. En verano a pleno sol conviene evitar las horas más calurosas, así como siempre ir con calzado adecuado para las rutas.
No obstante, no tiene mayor dificultad y se puede hacer con niños y perros convenientemente atados porque es un sendero que suele recibir a muchos caminantes. Especialmente en el descenso a la poza, donde hay que andarse con cuidado especialmente si el terreno está húmedo.
El Trabuquete, a un paso del Parador de Jarandilla de la Vera
El Trabuquete está en Guijo de Santa Bárbara, a apenas diez minutos de Jarandilla de la Vera, donde se encuentra el Parador de Turismo en el antiguo castillo-palacio en el que se hospedó Carlos V camino del Monasterio de Yuste, el cual ha ampliado recientemente la visita al jardín del Emperador.
Toda una carretera paisajística la de Guijo de Santa Bárbara
Ya solo la carretera hasta Guijo es toda una carretera paisajística para ir sin prisas envuelta por abundante arboleda. El coche se puede dejar en la plaza del ayuntamiento y atravesar el pueblo, el más alto de La Vera a mil metros de altitud.
El paseo permite disfrutar de ejemplos de la arquitectura verata de piedra y adobe y un antiguo lavadero cerca del ayuntamiento o del pan que solo se vende allí, para los amantes de toda ruta del pan artesano en Extremadura, y de las mermeladas artesanas, de muy diversos tipos y hasta sin azúcar, de todo un clásico como es Casa Alonso. Recursos que dejan entrever el interés turístico de Guijo de Santa Bárbara y donde se pueden obtener folletos informativos sobre el Trabuquete.
En la misma plaza ya se ven las indicaciones a la ruta del Trabuquete aunque el coche también se puede dejar cerca del inicio del camino, cerca del restaurante que lleva el mismo nombre que el charco y donde empiezan o acaban muchos visitantes.
En ruta al Trabuquete
Un mapa indica que hay una ruta más amplia y circular, de 12 kilómetros hasta el Refugio de las Nieves, que es de mayor dificultad con un desnivel de unos 800 metros y al menos cuatro horas de duración. Hasta el Trabuquete, a unos tres kilómetros y no más de 180 metros de desnivel, el sendero es el mismo y discurre en paralelo a la Garganta Jaranda.
El sendero empieza estrecho siguiendo una curiosa indicación sobre las piedras, sueltas muchas pequeñas a lo largo del camino, que obligan a ir pendiente y por lo que conviene ir deteniéndose para contemplar el paisaje con Gredos al fondo. El agua fluye por todas partes y en verano hay charcos, como El Calamojero, donde se ve a los primeros bañistas entre los cantos rodados.
Más arriba se atraviesan puentes de nombres tan curiosos como del Tocino y Cicuta y hay que pasar también una portilla cerrada que hay que dejar como se encuentra o cruzando por una piedra lateral sin mayor dificultad. Señales de que el Trabuquete está ya cerca.
El sonido del agua es una constante y cuando se contempla el charco desde arriba, un puro espectáculo que va a más a medida que se desciende. Con precaución, pero se puede bajar sin ser un avezado caminante. El premio salta a la vista. Tanto por el puro placer de la contemplación o para darse un chapuzón en un charco idílico, eso sí, frío, pero de aguas cristalinas entre paredes rocosas de gran verticalidad.
Ponerse las pilas en Las Pilas de Collado de la Vera
La ruta del Trabuquete pone las pilas a cualquiera, pero quien prefiera bañarse más cómodamente, cerca hay una piscina natural que se llama curiosamente Las Pilas de Collado de la Vera que está como a media hora en coche. Su chiringuito es muy cuco y abre todo el año.

El Charco de la Máquina
Los que prefieran seguir subiendo y bajando pendientes, a las afueras de Guijo de Santa Bárbara tienen también otro de los charcos imprescindibles del norte de Extremadura, el charco de La Máquina, otro paraíso de La Vera, repleta de charcos garganta arriba y abajo.

El Mirador de las Ollas
Más cómodamente, en Garganta la Olla, lo recomendable es visitar uno de los miradores más recientes que han dejado a la vista las marmitas gigantes de La Vera, el Mirador de las Ollas de Garganta la Olla.

Ya a un paso de Plasencia, Tejeda de Tiétar esconde la otra Chorrera de Extremadura
Son algunos de los atractivos que esconde La Vera y ya más cerca de Plasencia, Tejeda de Tiétar puede presumir de la otra Chorrera de Extremadura, la de Tejeda de Tiétar en La Vera, a donde se llega por una preciosa ruta, sobre todo un primavera, atravesando una espléndida dehesa de robles.

Publicado en septiembre de 2021