La Gran Orden de Defensores de Badajoz nace para que los niños sean promotores del patrimonio abaluartado de la capital pacense. El objetivo es que adquieran conocimientos para informar a los visitantes sobre sus recursos culturales y patrimoniales. También, que participen en encuentros o conferencias dando testimonio de las excelencias del lugar en el que viven, que son muchas y no vienen en ningún libro de texto.
La iniciativa es de la concejalía de Turismo y Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Badajoz, al frente de la que se encuentra Jaime Mejías y por la asociación Amigos de Badajoz.
Arranca en el inicio del curso 2020-2021 como una experiencia piloto. Se desarrollará un trimestre en seis colegios públicos, entre alumnos de quinto y sexto de Primaria. La idea es darle continuidad, implicando a instituciones como la Junta de Extremadura y empresa privada.
Lo que se ama, no se daña
Partiendo del convencimiento de que no se daña lo que se ama se quiere conseguir que los niños conozcan, valoren y respeten el patrimonio. Que entiendan y transmitan la importancia de lugares emblemáticos como la Alcazaba de Badajoz, la más grande de Europa o la Catedral de San Juan, icono del turismo religioso en Extremadura. También de fiestas como el Carnaval de Badajoz que aspira a ser de Interés Turístico Internacional, la Semana Santa que lo es de Interés Nacional o Al Mossassa, que recrea la fundación de la ciudad y su origen árabe.
Esos pequeños grandes defensores del turismo de Badajoz estarán encantados de contar que Badajoz es una joya del turismo ornitológico y un lujo para el turismo de autocaravana. O que tiene unas rutas fantásticas para amantes del senderismo y el deporte y unos desayunos excepcionales. Sin olvidar la ruta entre murales del casco antiguo.
De esta manera se estará contribuyendo a frenar actos incívicos y vandálicos en Badajoz, una ciudad imprescindible en el recorrido turístico por Extremadura.
Aprender jugando
Para que esta enseñanza resulte atractiva se ha editado material especial. Por un lado, los Cuadernos de trabajo del Gran Libro de la Orden, con contenido sobre historia, fiestas, gastronomía, monumentos, museos y servicios ciudadanos. Por otro, la Lectura de la Orden con varios capítulos extraídos de 50 historias de la historia de Badajoz, de Jesús Bartolomé, dos mapas y hojas en blanco que tendrán que trabajarse en casa, con la familia, a la que también implica La Gran Orden de Defensores.
Además se han contratado monitores que junto con los educadores desarrollarán esta experiencia. Lo harán con propuestas lúdicas y pedagógicas, desde visitas a monumentos y puntos de interés hasta juegos de pistas o superación de retos.
Un ejército de lo más simbólico
La Gran Orden de Defensores de Badajoz se ha organizado simbólicamente como una estructura militar. En su parte más alta están los Grandes Maestres (alcalde de Badajoz y presidente de la Asociación Amigos de Badajoz); a continuación, los Meseros Mayores (concejal de Turismo y el responsable del área de Educación de la asociación, Manuel López García) y en la base los Generales de la Orden, desde los directores de los colegios, identificados como Capitanes, los tutores y demás docentes que serían los Suboficiales y los alumnos, convertidos para la ocasión en Defensores o Soldados.
La iniciativa es un modelo que no hay que perder de vista porque se erige como un noble método contra el incivismo como enemigo común. Las armas elegidas para conseguir el objetivo son, sin duda, las mejores: el aprendizaje y el conocimiento.
Publicado en septiembre de 2021
© Planveando Comunicaciones SL