
A la Cascada Marte en el Valle del Jerte puede el visitante asomarse a través de una pasarela de metal no apta para personas con vértigo. Eso sí, el torrente de agua que se va descubriendo a cada paso es espectacular, como la visión que se tiene del Valle del Jerte al elevar la mirada. Si se mantiene el equilibrio, se puede tomar una fotografía del salto de agua que se sitúa justo debajo y a una altura considerable de la pasarela. Pero si no, solo la sensación es digna de sentirse y la seguridad está garantizada incluso para ir con niños. De hecho es una visita ideal para hacer con ellos.
La Cascada Marta en el Valle del Jerte es un paseo con sorpresa final
Apenas son unos metros los que se recorren sobre la pasarela y la ruta para llegar hasta ella es muy corta y sencilla. Está a un kilómetro de Valdastillas, uno de los once pueblos de la comarca, y siguiendo las indicaciones se llega fácilmente hasta un claro donde se pueden aparcar los coches. Hay que tomar el sendero de la derecha y bajando por una pendiente se llega enseguida a un merendero y a continuación a un viejo lagar de aceite, el lagar del tío Alicio, que estuvo funcionando hasta 1981. Solo en el exterior se pueden ver restos de donde se pisaba la aceituna a orillas de la garganta, lo que de por sí es muy interesante.
A un paso el sendero se estrecha y termina en la pasarela escondiendo todo un espectáculo de la naturaleza entre abundante vegetación. La garganta se convierte entonces en un espléndido mirador al Valle del Jerte.
Publicado en marzo de 2021