En verano cientos de gargantas bajan de las montañas del norte de Extremadura y muchas de estas gargantas se nutren de las nieves del invierno. Estas nieves que coronan las montañas y adornan los campos y los pueblos en estos meses.
La nieve siempre es un buen plan, para esquiar, por ejemplo. El punto de esquí más cercano al norte de Extremadura es La Covatilla, en Béjar. Si bien esta localidad pertenece a Castilla y León, su próximidad y nexos de tradición la hacen casi extremeña. La Covatilla tiene instalaciones completas para la práctica del esquí, además dispone de todos los servicios necesarios, desde escuela, alquiler de equipos, cafetería y hasta taller, por si hace falta reparar algún implemento,
Muchas localidades extremeñas aledañas a Béjar ofrecen servicios para los amantes de la nieve, en La Garganta, Hervás y Baños de Montemayor los restaurantes y alojamientos se preparan para estas visitas y ofrecen servicios especializados. Hasta el camping Las Cañadas se adapta a las necesidades de la nieve y ofrece acogedores bongalows para el descanso y alquiler de equipos para los esquiadores. Sin duda, a La Covatilla se le puede considerar la estación de esquí del norte de Extremadura y son los extremeños y los portugueses, seguidos de los madrileños, los que más la visitan.
Tan fluida es la relación con Extremadura, que la Diputación de Cáceres ha suscrito un acuerdo con el Ayuntamiento de Béjar, que la gestiona, para mostrar en sus instalaciones la oferta turística de la provincia durante los últimos fines de semana de marzo de 2015. Así como para que 500 escolares de la provincia cacereña participen en un programa deportivo de iniciación al esquí en La Covatilla.
Sin embargo, la nieve no es solo para aquellos que hacen deporte en ella, jugar en la nieve es uno de los mayores placeres, para esto el puerto de Honduras, Tornavacas y, por supuesto, Piornal, el pueblo más alto de Extremadura son lugares ideales para hacer muñecos de nieve, ángeles en el suelo campo o una verdadera batalla de bolas de nieve. Pero hay otro grupo de personas que también disfrutan de la nieve de manera especial, aquellas que solo quieren verla, verla coronando las montañas de Las Hurdes y Sierra de Gata, del Valle del Jerte o de Gredos en La Vera.
Pasear por las carreteras, encontrar un hermoso lugar y tomar un café caliente mientras afuera el blanco se apodera de todo, es un placer por el que vale la pena hacer un plan para ir a la nieve en el norte de Extremadura.
Publicado: 16 enero 2015