Los caminos del jamón de Extremadura por medio centenar de municipios

Más de medio centenar de localidades de Badajoz y Cáceres

conforman los caminos del jamón de Extremadura. Un recorrido con sabor auténtico que hace de la región un destino gastronómico pata negra, que marida a la perfección con el turismo de naturaleza y patrimonio.

La Ruta del Jamón Ibérico Dehesa de Extremadura en Badajoz discurre por 33 localidades de las comarcas de Tentudía, Campiña Sur y Sierra Suroeste. Un camino que lleva por poblaciones como Valencia del Mombuey, Oliva de la Frontera, Jerez de los Caballeros, Fregenal de la Sierra, Fuentes de León, Monesterio, Llerena, Azuaga, Higuera la Real o Montemolín.

Son destinos imprescindibles en esta senda que tiene en Monesterio uno de sus pilares fundamentales, por albergar el Museo del Jamón Ibérico, y por celebrar el Día del Jamón cada septiembre, coincidiendo en este 2018 con el sábado 8, Día de Extremadura. Una fiesta en torno a una de las joyas gastronómicas de nuestra región que es Fiesta de Interés Turístico de Extremadura, en la que a los visitantes llegados de toda España se les recibe con bocadillos de jamón.

Antes, Jerez de los Caballeros deleita los paladares con su Salón del Jamón Ibérico que este año alcanza su XXIX edición, y se celebra del 25 de abril al 6 de mayo con actividades profesionales y también otras abiertas al público. Rutas y talleres gastronómicos, degustaciones o exhibiciones de cocina, son algunas de estas últimas.

Además la Fiesta de la Chanfaina en Fuente de Cantos acoge el VI Concurso Nacional de corte de jamón ibérico de Extremadura, el 28 de abril, si bien la Fiesta ,de Interés Turístico Regional, se celebra entre los días 27 y 29.

La Ruta del Jamón Ibérico Dehesa de Extremadura, ya en la provincia de Cáceres, se extiende por la comarca de Montánchez-Tamuja, con 19 municipios entre los que se encuentran Aldea del Cano, Almoharín, Arroyomolinos, Benquerencia, Botija, Montánchez, Plasenzuela, Sierra de Fuentes, Torre de Santa María, Torreorgaz y Zarza de Montánchez.

La dehesa, el gimnasio del cerdo ibérico

Casi un millón de hectáreas de dehesa hacen de Extremadura un paraíso ecológico para la cría del cerdo ibérico, que encuentra en este ecosistema el pasto y la bellota con los que se alimenta y que hacen único el Jamón Dehesa de Extremadura. Un producto también excepcional por el terreno que estos animales tienen a su disposición para moverse y hacer ejercicio, que es algo fundamental para conseguir una grasa de calidad.

La dehesa se convierte así en un gimnasio privilegiado para el cerdo ibérico, del que se obtienen jamones veteados, con saludable grasa y pezuñas redondeadas, que avalan las horas de pateos y paseos por el campo.

Colores del Jamón Dehesa de Extremadura

Los jamones y paletas Dehesa de Extremadura pueden llevar precinto negro, que certifica que proceden de cerdos que se han alimentado exclusivamente de pasto y bellota. O verde, para el producto obtenido de animales que en su fase de engorde han tenido alimentación suplementaria con pienso. Sellos, en cualquier caso, que certifican la calidad de un producto final cuya obtención ha sido seguido por expertos desde el principio hasta el final.

El jamón de Extremadura se ha convertido por sí mismo en un recurso turístico capaz de atraer a los paladares más exigentes. En torno a su degustación, se ofrecen catas, clases magistrales de corte de jamón, visita a secaderos en los que se conoce el proceso de curación, maridajes con vinos de la tierra como los de la Denominación de Origen Ribera del Guadiana, matanzas didácticas, ferias del jamón ibérico como las de Fuentes de León o la del Embutido en Llerena.

Propuestas para alimentar el cuerpo, que merece la pena combinar con otras que sin duda nutrirán la memoria viajera. Ahí van algunas:

Dar un paseo con encanto por Jerez de los Caballeros y la señorial Llerena

Recorrer la huella templaria en Extremadura

Descubrir Fregenal de la Sierra y disfrutarlo

Subir al castillo de Montánchez y visitar su cementerio, entre los más bonitos de España

Jamón con vinos por Extremadura DO Ribera del Guadiana, un tentempié de bandera