Las barreras se rompen cuando la actitud de las personas las hacen invisibles, las desdibujan y reducen a líneas sobre el papel. Sucede en el Parque Natural y Reserva de la Biosfera del Duero y Los Arribes, en los que el Duero-Douro une España y Portugal, con ejemplos de auténtica cooperación transfronteriza, en localidades como la lusa Freixo de Espada à Cinta y las españolas Saucelle e Hinojosa de Duero.
Tres lugares abrazados en el mismo propósito de impulsar turísticamente una zona plena de naturaleza pero, sobre todo, plena de gestores políticos y vecinos empeñados en ese objetivo común de desarrollo.
En planVE Guía de Ocio de Extremadura, nos gusta como a ellos derribar barreras y apostar por lo que une, por eso hacemos sitio a este proyecto en nuestra web, aunque geográficamente no se enmarque en la región. ¿No son acaso la naturaleza, un río como el Duero, o recursos como la ornitología, el senderismo y la gastronomía patrimonio universal?
Freixo, la villa más manuelina de Portugal
El Parque Natural y los Arribes del Duero se alcanzan desde el norte de Extremadura a través de Sierra de Gata y el puerto de Perales, desde donde se pasa a la provincia de Salamanca y después a Portugal. Un recorrido por carreteras en las que la vida late lenta y que obligan a levantar el pie del acelerador para pararse a mirar. Solo a mirar, que ya es mucho.
Eso sucede también en Freixo de Espada à Cinta, que se alcanza pasada la presa de Saucelle, desde donde se da la bienvenida al viajero con un impresionante paisaje de cortados. Al que fuera antiguo poblado de Iberdrola se le va devolviendo la vida como Complejo Turístico Aldea Duero, convirtiendo en alojamientos rurales o en un magnífico restaurante, las casas de quienes trabajaron en la construcción del embalse, que es todo un ejemplo de recuperación de espacios en desuso para el turismo.
Arriba aguarda Freixo de Espada à Cinta, el pueblo más manuelino de Portugal por la arquitectura típica de este movimiento que conserva en sus fachadas. Es el lugar en el que visitar un Museo de la Seda único en su especie dentro de la península ibérica.
Cuenta también con sorpresas como una iglesia matriz que diseñaron los mismos arquitectos de los Jerónimos de Lisboa, detrás de la que merece la pena extender la vista desde su Torre do Galo y recrearse en su magnífico cementerio.
Es un pueblo con judería y una espada abrazada a un fresno, que buscar en una especie de gynkana para ver quién la encuentra el primero, igual que pasa con la famosa rana de la Catedral de Salamanca.
Saucelle y su posada del Brasilero
En Freixo no alardean de nada. Ofrecen con generosidad y sencillez sus vinos del Douro, los zumos recién exprimidos con la fruta de cientos de naranjos que envuelven un paisaje en el que cada primavera brotan los almendros. Una explosión de naturaleza, colores y olores, que comparte con Saucelle, donde se elaboran deliciosas y perfectas flores de anís y ‘engañaos’ recubiertos de azúcar.
La oficina de turismo se encuentra al pie de la Posada Real El Brasilero, recuperada por el Ayuntamiento en un bello edificio de la Red de Posadas Reales de Castilla y León, en el que hizo parada y fonda la actriz Ana Duato, en uno de sus viajes gastronómicos para la televisión y en el pueblo cuentan con orgullo que quedó maravillada.
Hinojosa de Duero es un pueblo museo con excelentes embutidos y quesos de oveja, en el que las almendras del entorno se utilizan para hacer unos dulces capaces de insuflar la energía suficiente para hacer kilómetros de senderismo por su magnífico entorno.
Alcaldes que no lo parecen
Este entorno del Parque Natural del Duero ha sido el marco del I Encuentro de Perodismo, Gastronomía y Turismo organizado para promocionar la zona. Una iniciativa puesta en marcha entre empresarios y representantes municipales que reconfortan porque no lo parecen.
Por ejemplo, la alcaldesa de Freixo, María Do Cèu Quintas, acompaña a los visitantes en el paseo por el municipio como una más, sin protocolo ni jefe de prensa y su marido es el primero en coger los cubiertos para repartir la comida ente los invitados a su mesa. Igual que hace Diego Ledesma, el alcalde salmantino de Saucelle, que tiene su restaurante en la parte portuguesa de Freixo y ningún reparo en ponerse la chaquetilla de hostelero y llenar las tazas del café en el desayuno de gente de la prensa llegada desde Castilla y León, Extremadura, Madrid y Portugal .
José Francisco Bautista, primer edil de Hinojosa de Duero y diputado por Salamanca en Castilla y León, es uno más entre los invitados en torno a la empanada, chorizos, quesos, hornazo o crujientes obleas con los que agasaja a los visitantes.
Un destino auténtico
Todo es autenticidad en este escenario, como la de Edison, el joven portugués que va relatando a los viajeros los detalles del Parque Natural y Los Arribes del Duero en el barco que lo recorre. Gente sin ambages, sin rodeos y sin absurdos complejos, viene a decir “esto es lo que tenemos y con mucho gusto se lo ofrecemos; sólo les pedimos que lo cuenten a los demás para que puedan también disfrutarlo y se impulse la zona”.
Pues eso es lo que con sumo gusto hacemos, tras participar en el I Encuentro de Freixo, invitados por el promotor turístico Eugenio Rodríguez, un extremeño que también se ha empeñado en derribar fronteras. Eso y también poner a disposición de quien lo desee los reportajes en portugués de planVE para promover el turismo hacia Extremadura entre los luso hablantes.
Publicado en enero de 2017