
Siempre resulta dudoso, y arriesgado, comparar lenguaje oral y lenguaje escrito, porque si decimos de alguien que escribe como habla, probablemente estemos queriendo decir que no domina las convenciones de la lengua escrita y que se limita a transcribir el discurso oral sin reparar en que ambos funcionan de manera diferente, en que lo que en uno es eficaz, en otro no lo es y viceversa, y si, por el contrario, afirmamos que habla como escribe, estaremos insinuando que es un pedante, que se expresa de manera innecesariamente pomposa y regalada, lo que no deja de ser, en el fondo, una forma de ignorancia en sentido contrario.
Digo todo esto porque lo primero que me pide el cuerpo, puestos a hablar de La gran aventura de los griegos, de Javier Negrete, es decir que, leyéndolo, uno tiene la impresión de estar oyendo a su autor hablar, y soy consciente de que este tipo de afirmaciones son arriesgadas, porque alguien lo podría malinterpretar, pensando que lo acuso de ignorancia o de pedantería. Si me permito el lujo de compararlo es, en primer lugar, porque tuve la enorme fortuna de ser alumno de Javier hace mucho tiempo, en el IES “Gabriel y Galán”, y todavía recuerdo vivamente el placer de escucharlo contar episodios de historia o de mitología, pero también porque sé lo difícil que puede llegar a ser, y lo que tiene, al final, de elaboración, escribir de manera que pueda leerse con la fluidez con la que se escucha el lenguaje oral -cuando este tiene la fluidez que Javier ha tenido siempre hablando, que hay quien, incluso hablando, se expresa de manera insoportablemente aburrida y farragosa-.
Pero vayamos al grano: La gran aventura de los griegos es un libro de divulgación histórica en el que Javier Negrete, aprovechando su profundo conocimiento de la cultura clásica y su forma amena y directa de decir las cosas, nos cuenta, desde la época micénica hasta la llegada de Roma, la prolongada aventura de los griegos, que abarcó varios milenios y está plagada de episodios muy interesantes que nos hacen sentir pequeños, casi insignificantes, a los que, como yo, muchas veces vivimos como si el mundo, y la Historia, no tuvieran más de dos mil años.
Por el tono, y el afán divulgativo, el libro a menudo me ha recordado a la Historia de Roma de Indro Montanelli, un libro que Javier ya nos recomendaba en el instituto y que algún tiempo después de pasar por sus clases de griego leí con enorme disfrute, aunque me temo que la aproximación de Javier al mundo de los griegos es más profunda y rica en detalles que la de Montanelli con Roma, y buena muestra de ello es la pormenorizada descripción de las campañas militares, en las que Negrete, que es, sin duda, un excelente narrador, consigue llegar a meternos en la piel de los hoplitas, pero también las frecuentes disertaciones sobre todo tipo de aspectos de la vida cotidiana de los griegos.
En definitiva, La gran aventura de los griegos es un libro que no puedo dejar de recomendarles si tienen interés en el mundo clásico, y si no lo tienen, también, porque estoy seguro de que, al leerlo, les entrarán ganas de conocer más, de leer, no sé, a Herodoto, a Tucídides, o a Platón y a Aristóteles, de ver obras de Sófocles o Eurípides, y, seguramente, de meterle también, luego, mano a Roma victoriosa y Roma invicta, los dos primeros títulos de la trilogía que Javier Negrete ha dedicado a contar, también, la gran aventura de los romanos.
La gran aventura de los griegos
Javier Negrete
La esfera de los libros
13,90 euros
Publicado el 11 de noviembre de 2016