La piscina natural de Torre de Don Miguel tiene un encanto especial, enclavada en la majestuosa Sierra de Gata, está ubicada en el Parque Arqueológico Los Molinos de la Torre y cuenta con unas modernas instalaciones, todos los servicios necesarios y amplios espacios con césped para relajarse y justo al lado de los restos de un antiguo molino. Las frías aguas de su piscina refrescan en días veraniegos y un agradable chiringuito completa la oferta de una de las mejores piscinas de Sierra de Gata.
Chiringuito Los Molinos
Algo que hace más especial aún esta piscina es su chiringuito, arrendado por la fotógrafa Llaremi González y que despliega unas velas blancas en lo alto del lugar, junto a olivos y árboles y con unas vistas maravillosas, abajo la piscina y su bullicio y en lo alto de la montaña, la Almenara de Gata.
El chiringuito está a dos minutos en coche desde el pueblo de Torre de Don Miguel y a 10 minutos andando, tiene unas excelentes instalaciones, buen servicio y ambiente. Un lugar donde se pueden degustar diversos platos, desde aperitivos y bocadillos hasta pinchos tradicionales de la Sierra de Gata como la sopa de patatas fritas, caldo de patata, ensalada de limones, pringás, chanfaina y sopetón.
Además, durante el verano en el chiringuito de la piscina se organizan distintas actividades para sus clientes como visitas guiadas a Los Molinos con la colaboración de la Asociación Sierra de Gata Activa, juegos tradicionales y proyecciones, como la de El Capazo, un documental sobre esta antigua tradición que se celebra cada mes de abril en Torre de Don Miguel y donde ser sirve el dulce típico de esta fiesta: el Sopetón.
Las actuaciones musicales, como la del grupo Entre las Cejas el viernes, 29 de julio, o el grupo Chaplin 2.0, el domingo 7 de agosto, son incentivos adicionales para no perderse un día de diversión y relax en este chiringuito con baño de piscina natural incluido.
1 comentarios
No os recomiendo el sitio llegamos con un perrito de 3kg y un señor que estaba sentado en una mesa bebiendo cervezas con los amigos no nos dijo ni hola, directamente, “con el perro no podéis entrar” muy desagradable. Se acerco una camarera nos vio la cara que pusimos y nos dijo que podíamos atar al perro a 100mt, por un camino que había sin tener vigilado al perrito, para poder comer. Un poco desagradable. Nada recomendable.