Trabajar cansa –Lavorare stanca– es el título del libro quizá más conocido del poeta, narrador y crítico italiano Cesare Pavese. Se publicó en 1936 y es un largo libro de poemas claros, sencillos, objetivos, muy narrativos, protagonizados por obreros, campesinos, prostitutas, borrachos, vagabundos, centrados en la realidad cotidiana –en la dura realidad cotidiana muchas veces– y que algunos han señalado casi como un preludio del neorrealismo. Como homenaje al libro de Pavese, nuestro paisano Javier Morales ha decidido utilizar su título –Trabajar cansa– para dar nombre a su última novela, no, desde luego, de manera caprichosa, sino porque entre ambos libros se establece una cierta afinidad de estilo, de intención, de punto de vista, aunque sólo sea en la sencillez, en la claridad con que están narradas las cosas, o en la mirada objetiva que ambos arrojan sobre la muchas veces dura realidad de cada día.
Esa realidad, en el caso de la novela de Morales, es la de la actual crisis económica, con sus terribles repercusiones en el mundo laboral, una realidad que no tarda en retratar, ya en las primeras páginas, cuando hace referencia a los recortes en Portugal aprovechando las vacaciones en el Algarve de dos de sus protagonistas, Daniel y Silvia, o cuando nos cuenta que esta última, “abogada laboralista en una prestigiosa consultora, con la crisis tiene más tarea y más ingresos que nunca”, y eso porque “se ha especializado en la gestión de expedientes de empleo”. Tampoco tarda Javier en plantear los principales conflictos que estructuran el libro, el sentimental, la situación de crisis de la pareja, y el laboral, que en el caso de la abogada se concreta en hartazgo, en el deseo de dejar un trabajo duro, que no le satisface, con el que, en realidad, jamás soñó, y en el de su marido, amante de la Literatura, en el desencanto frente a la Universidad, donde trabaja, y en la sensación de que el trabajo es, en realidad, “como una condena”.
Trabajar cansa es un libro sobre la crisis, la crisis económica, la crisis laboral, la crisis sentimental, la crisis de los cuarenta, y para redondear la visión de todos estos aspectos críticos Javier Morales nos ofrece, como contrapunto a la situación de Silvia y Daniel, pareja con una situación económica media-alta, la de otra pareja de clase media-baja, la que forman Paula, que trabaja a media jornada en un estanco, y Félix, empleado de una agencia de viajes, que no tardará en sufrir en sus carnes el duro trance de un expediente de regulación de empleo, un expediente utilizado con descaro por la empresa para luego llevar a cabo una importante operación financiera, que le obligará a relacionarse con sus compañeras en una complicada proyección laboral del dilema del prisionero y que, en esta novela de historias que se complementan y entrecruzan, le llevará a encontrarse, en el bando contrario, como asesora de su empresa, con Silvia, la mujer de Daniel, la abogada desencantada.
Este personaje, Daniel, está escribiendo una novela y en un momento dado dice de ella, “me la planteo más bien como una novela de tesis, un complemento a mis trabajos universitarios. Literatura para explicar la filosofía. Decía Sartre que la filosofía se marchita pero la verdadera literatura no. Hay más verdad en El Quijote que en miles de tratados sesudos sobre el Siglo de Oro”, un propósito que, a mi modo de ver, pone también de manifiesto las intenciones de Javier Morales con Trabajar cansa, poner la Literatura al servicio de la verdad, para retratar, con vocación de denuncia y con ese estilo claro y compasivo que yo alguna vez quise llamar realismo limpio, la difícil situación que vivimos, especialmente en lo que respecta al mundo laboral, absolutamente consciente de que, como afirma el desaparecido Rafael Chirbes en una de las citas que sirven de introducción a su novela, “la novela no puede dejar de detectar el complicado juego de tensiones de su época. Se cuelan dentro de ella, y también la iluminan desde el exterior, la cercan”.
Trabajar cansa
Javier Morales Ortiz
Baile del sol
10 euros
Publicado: 24 de junio de 2016