Hace ya unos años, la Corrobra Folklórica y Etnográfica “Estampas Jurdanas” de mutuo acuerdo con la Mancomunidad de Municipios de Las Hurdes, a tenor de las llamadas que recibían, decidieron presentar lo más selecto de los “rejuíjuh” (pantomimas) del “Carnaval Jurdanu” en el mercado dominical del pueblo de Ahigal. Cierto es que recibieron ofertas de ciudades más sonoras y rimbombantes, pero optaron por aquel mercado tradicional que de siempre fue toda una referencia para la comunidad jurdana. De hecho, a este mercado, situado casi a las puertas de Las Hurdes aunque su lugar estuviera en la comarca de Tierras de Granadilla, acudían desde tiempo inmemorial cientos de jurdanos, a fin de adquirir objetos agropecuarios y atender a otros tratos y mercaderías.
Ahigal triplica o quintuplica su población la mayor parte de los domingos del año. En torno a su mercado, se juntan, aparte de las docenas de vendedores ambulantes (antes se celebraba rodeo de ganado), cientos de comarcanos no solo de Tierras de Granadilla sino de otras demarcaciones cacereñas y salmantinas, los cuales ambientan los espacios con sus compadreos y empinando el codo y llenando la andorga con los buenos vinos pitarreros y los generosos aperitivos que sirven en las tabernas. Las comadres no se quedan a la zaga, que revolotean como abejas en torno a los panales de los muchos puestos de ropas, calzados, frutas y hortalizas y otras vituallas mil.
Entre ese abigarrado y multicolor mundo de mercaderes, saltarán, bailarán, cantarán y harán “la antruejá” el próximo domingo, día 31 de enero, todo un conjunto de vecinos del concejo jurdano de Lo Franqueado, sobre todo de la alquería de Horcajo, donde el día 6 de febrero, “Sábadu Gordu del Antruejo”, se llevarán a cabo los actos centrales de estas arcaicas, rupturistas y libertarias carnestolendas. Antes de irrumpir en el mercado, los “encarantoñáuh”, “enzamarráuh”, “entruejáuh” y “enramajáuh” visitarán algunas bodegas de Ahigal, como las de Crispín “Botella” y la de la Hermandad Jurdano-Ahigaleña, que abren generosamente sus puertas para que los jurdanos puedan calentar motores.
Luego, presididos por el “Rey del Antruejo”, el pelele “El Morcillu” y los tamborileros, dará comienzo la furriona, la divertida jarana que un año más hará vibrar la población de Ahigal, trayendo de la noche de los tiempos todo un sinfín de rituales donde a la tortilla se la voltea por completo, pasando el mendigo a ser monarca, el monaguillo se convertirá en obispo y el timorato en rijoso personaje que se encarna en lujurioso y legendario toro.
Se recorrerán las tascas del lugar y, a la hora del yantar, el Ayuntamiento de Ahigal invitará a los heterodoxos miembros de la cofradía carnavalera a una opípara comida, para que llenen bien la andorga y continúe la fiesta, que siempre se dijo que “de la panza sale la danza”.
Fotografías de la presentación del pasado año del Carnaval Jurdanu en la localidad de Ahigal, cortesía de José María Domínguez Moreno
Publicado: 26 de enero de 2016