Los que tuvimos la suerte de conversar con Gabriel Sabau Bergamín durante el desempeño de nuestras tareas educativas en la comarca de Las Hurdes, nos pudimos percatar de su bonhomía y de su cariño y entrega por tan legendarias tierras, a las que visitaba con gran frecuencia y en las que tenía varios ahijados. Él era nieto de Francisco Bergamín, que fuera ministro de Instrucción Pública con Eduardo Dato y de Hacienda con Antonio Maura, en el primer cuarto del pasado siglo. De profesión abogado, ocupó, en épocas de UCD, un alto cargo en el Ministerio de Justicia, lo que le permitió invertir un buen puñado de millones de pesetas en levantar pequeños templos eclesiásticos en una larga lista de alquerías jurdanas.

Sería entonces cuando se instituyeron numerosas fiestas patronales en tales aldeas, como fue el caso de la alquería de El Castillo, en el concejo de Lo Franqueado. Gabriel Sabau, que había sido muchos años cronista oficial del Real Sitio de San Lorenzo de El Escorial, falleció el día de Navidad del pasado año, cuando ya había rebasado las 95 primaveras.
Se levantó el templo en El Castillo y se puso como patrona a la Virgen de Fátima. Este año tales fiestas patronales se iniciarán el próximo jueves, día 6 de agosto, cuando la tarde de esta jornada se llene de juegos infantiles y se celebre el campeonato de raya. Y cuando caiga el día y tienda su negra anguarina sobre esta preciosa aldea cuyo topónimo trae ecos de un nebuloso castillo que hubo entre las asperezas de los altos y riscosos parajes de “La Zambrana”, toda una “Noche de Terror” se apoderará de sus retorcidas calles y sus pintorescos rincones.

La alquería devendrá en un pueblo fantasma y, a la vuelta de cualquier esquina, el visitante recibirá sustos de infarto y el horror erizará el vello de su cuerpo. Repuestos de tan terrorífica noche, el día 7, viernes, lo dedicarán a darle al balón entre solteros y casados, así como a tirar reciamente de la soga. Después de la cena, la verbena, con la orquesta “Celadama”.
La jornada del día 8, sábado, sería el día grande. El tamborilero, a primeras horas de la mañana, recorrerá las calles tocando la “arborá” y comenzarán a repartirse los dulces tradicionales y el aguardiente. A las 12,00 horas, las solemnes misa y procesión, bajo los sones de la gaita y el tamboril. Una hora más, tendrá lugar el concurso de tortillas y la degustación de la sangría. Por la tarde se celebrará el campeonato de tute, cerrándose las fiestas con la segunda verbena popular, amenizada por el grupo “Suroeste”.
Unas fiestas que tienen honda repercusión a lo largo y ancho de la comarca de Las Hurdes, sobre todo por su espectacular “Noche de Terror”, que algunos piensan que habría que rellenar con todos esos espantos que forman parte de la mitología jurdana. Y es que el territorio jurdano tiene más que de sobra terroríficos personajes, sin necesidad de acudir a importarlos de fuera.

Por los escondidos y estrechos valles, así como por las fragosas montañas de la comarca, pulula toda una retahíla de fabulosos seres, a cada cual más horripilante y legendario, como el “Jáncanu” y el “Pelujáncanu”, los “Tíuh del Untu” y el “Machu Lanú”, las “Brújah” y las “Méngah”, la “Encorujá” y el “Pájaru de la Muerti”, el “Dimoniu con pátah de cabra” y los “Tíuh sin cabeza”, la “Pantahma” y los “Javichúchih”, la “Jornera” y la “Prucesión de las Ánimah”, el “Tíu de loh Pínchih” o la “Genti de Muerti”. Todo un serial de terror del que se ha escrito en reputados libros sobre temática socioantropológica, paranormal o mitológica y que incluso ha dado lugar a algún que otro corto cinematográfico.

Publicado el 3 de agosto de 2015