Si Pilar Marcos tuviera que dar instrucciones a algún forastero sobre qué hacer para disfrutar del carnaval de Navalmoral de La Mata, lo primero que le diría es que acudiese disfrazado para vivirlo a tope desde dentro. “Da igual la hora a la que elija hacerlo, por la mañana, por la tarde, por la noche o durante la madrugada, porque lo importante es meterse de lleno en la fiesta”, cuenta esta morala perteneciente a la peña Arco Iris, el grupo más veterano entre los que mantienen viva la fiesta en este momento. “Y si no viene disfrazado le preparamos rápidamente un traje”, apostilla la concejala de Ocio, María García.
La segunda recomendación para el visitante sería que se incorpore al pasacalles que sale el lunes a las cuatro de la tarde porque, a diferencia de los concursos de carrozas del domingo y el martes,está abierto a la participación de todo el mundo. “Recrea la manera antigua de celebrar el carnaval y puede desfilar quien lo desee, tanto si va solo como si se disfraza en grupo o con su familia”, señala Marcos. O sea, que no hay que tener más que ganas de hacerlo y, por qué no, de llevarse un premio, porque también se repartirán entre los participantes.
No son los únicos eventos de la fiesta por excelencia de Navalmoral, declarada de Interés Turístico Regional, que se va a desarrollar desde el viernes 13 de febrero hasta el miércoles 18. Seis días repletos de actividades para público de todas las edades, que tendrán como marco la calle, el escenario perfecto para acoger no sólo a los alrededor de 1.500 participantes entre comparsas y carrozas, sino también a los miles de visitantes que cada año se desplazan hasta el norte de Cáceres para vivir de cerca esta celebración en el corazón del Campo Arañuelo. Llegan desde Extremadura, pero también desde otras comunidades autónomas, hasta el punto de que la previsión es que este año se junten alrededor de 85.000 personas durante todas las fiestas.
HASTA CINCO TRAJES VESTIRÁN ALGUNOS
En Navalmoral están pensando en el carnaval todo el año. El día del Entierro de la Sardina, que comenzará a las 12.00 del miércoles 28 y durará hasta que anochezca, los carnavaleros ya estarán dándole vueltas en la cabeza a qué harán dentro de un año, de qué se vestirán y cómo engalanarán sus carrozas. De hecho, cuando Rafael Mateos, el alcalde, cierre esta semana festiva con un brindis gritará ¡Viva el Carnaval 2016!
Lo cierto es que es todo un modo de vida para quienes pertenecen a alguna de las 11 comparsas y cinco carrozas que visten de fiesta la localidad, grupos en los que se unen generaciones, desde los abuelos hasta los nietos, con el mismo propósito de disfrutar al máximo. Aparte del arraigo, el relevo generacional es el otro puntal para mantenerlo vivo. “Desde el Ayuntamiento trabajamos en este sentido con los estudiantes”, explica la edil de Ocio, “pero los estudiantes que están fuera vienen para la fiesta y se disfrazan y salen incluso el jueves”.
Eso sí, la puesta en escena es un secreto que solo conocen ellos porque para descubrirlo los demás tendrán que esperar a verles en la calle dentro del calendario oficial. Por eso es fácil que se pregunte a un carnavalero moralo que de qué se va a vestir este año, no al que viene, y que la respuesta sea que aún no lo sabe, que tiene muchos trajes y que ya verá, aunque la cuestión se plantee en la víspera de la inauguración. Hasta cinco pueden lucir en cada edición los más aficionados, ropa que a veces pasa de un año a otro con adaptaciones nacidas de una desbordante imaginación y que se mezcla con algún estreno de temporada.
“Aquí nunca repetimos”, asegura la concejala. El Museo del Carnaval es un sitio estupendo para comprobar esa variedad, no sólo a través de la exposición de vestidos sino también de fotos que se han ido haciendo desde 1926 y de los carteles que anuncian la cita y se han venido recogiendo desde 1981. Durante los días de fiesta se pueden concertar visitas guiadas o sin guía poniéndose en contacto con el Ayuntamiento o la concejalía de Ocio.
La fiesta, sin embargo, es mucho más antigua. Más de 300 años hace que se celebra sin interrupción porque ni siquiera los límites que imponía la dictadura consiguieron echar por tierra las ganas de juerga de los vecinos. Lo que hicieron fue, simplemente, cambiarle el nombre al evento y como el carnaval estaba prohibido le denominaron fiesta de invierno o de primavera, según la fecha en la que cayera, y listo.
JARANA HASTA EL AMANECER / VER AMANECER DESDE LAS CASETAS
La celebración arrancará el viernes a las 19.30 horas con la coronación de las reinas infantil y juvenil, Elena Calderón y Laura Martín, en el Ayuntamiento. Les tomará el relevo el pregonero, Fernando Pizarro, alcalde de Plasencia y presidente de la Fempex (Federación Extremeña de Municipios y Provincias). Cuando termine, el estruendo del chupinazo dará luz verde a casi una semana de festejos, pero para ir calentando motores por la mañana ya habrá desfile de jóvenes y talleres de maquillaje para los más pequeños en la Plaza de España.
Arrancar a un moralo cuáles son los actos más importantes de su fiesta grande es una misión casi imposible porque su respuesta es que lo son todos. Sin embargo, los que más público concentran son los desfiles de carrozas y comparsas que tendrán lugar el domingo y el martes a las 16.00 horas y el pasacalles que saldrá el lunes a las 19.00 desde la Cruz del Rollo. De hecho son los eventos que permiten ver de una pasada la esencia de la fiesta.
No hay que perder tampoco la oportunidad de darse una vuelta por las casetas Municipal de la Plaza de España y las que los hosteleros instalan en la explanada del Edificio Multiusos y en la Plaza de Las Minas. Son las que dan forma a una feria de música, comida y bebida que se extenderá durante la madrugada y desde la que incluso algunos se quedarán a ver amanecer.
El punto final de esta maratoniana fiesta lo pondrá el Entierro de la Sardina con sus lloronas vestidas de negro. Que nadie espere un desfile rápido porque comenzará a las 12.00 en la Plaza de España y continuará por el Hogar del Pensionista y los barrios del Cerro, Jumisa, Carpejar y el Molinillo hasta desembocar seis horas después en el parque municipal Casto Lozano con la quema de la difunta raspa.
Los moralos quieren que todo el que pueda se pase por su carnaval. De hecho, hay muchos foráneos que repiten porque se les recibe con los brazos abiertos. Si se acude disfrazado mejor, pero si no, que nadie se preocupe porque en un pispás y con cuatro trapos rápidamente se le hace uno.
GUÍA RÁPIDA PARA NO PERDERSE EN EL CARNAVAL
–Casetas:
La Municipal, instalada en la Plaza de España abrirá de 12.00 a 6.00 horas.
Las de Las Minas, en la plaza del mismo nombre, funcionarán de 14.00 a 2.00 horas.
Las del Ferial, en la Explanada del Edificio Multiusos, lo harán de 00.00 a 6.00 horas.
–Desfiles de Carrozas y Comparsas:
Saldrán el domingo 15 y el martes 17 a las 16.00 por la calle peatonal. Antes, a las 14.30, se concentrarán entre la Cruz del Rollo y el IES Augustóbriga.
–Pasacalles Carnavalero:
Tendrá lugar el lunes a las 19.00 desde la Cruz del Rollo hasta el Edificio Multiusos. La diferencia con los desfiles es que está abierto a la participación de todos los que quieran formar parte del recorrido.
–Entierro de la Sardina:
Punto final del festejo, comenzará a las 12.00 del miércoles 18 en la Plaza de España y seguirá por distintos barrios hasta las 18.00, que tendrá lugar la quema de la sardina en el Parque Municipal.
–Museo del Carnaval:
El viernes 13 abrirá de 11.00 a 14.00 pero para visitarlo el resto de los días de fiesta hay que concertar visita llamando al 927 573 161.
Fotografías cedidas por el Ayuntamiento de Navalmoral de la Mata. En portada, la Peña Tornado Dance en 2013, desafiando el frío de febrero.