En primavera el Jerte es el mayor escaparate de Extremadura, donde todo el mundo quiere hacerse un selfie con un cerezo en flor. La seña de identidad de una comarca donde millón y medio de cerezos acabarán por florecer aunque dependerá de la climatología que lo hagan hasta cubrir de blanco el valle entero o por zonas de estos once pueblos del norte de Extremadura.
Para seguir el estado de floración de los cerezos se puede consultar la web oficial del Cerezo en Flor, pero siempre es un buen momento para visitar el Valle del Jerte, incluso el año entero porque es una maravilla rural con numerosos parajes tan espectaculares también como los Pilones o la garganta de las Nogaledas, planes perfectos para completar una escapada al Cerezo en Flor. Aunque en primavera nadie quiere perderse el fenómeno natural de los cerezos en flor, único en España por lo que es Fiesta de Interés Turístico Nacional, y solo equiparable a los que se viven también en Japón o Washington.
Tanto es así, que la organización prevé la llegada de unos 50.000 visitantes, por lo que como novedad, ha dispuesto este año un servicio de autobuses gratis para ver los cerezos del Jerte sin retenciones de tráfico. Un reclamo turístico ligado al mayor sustento de la economía del Jerte, las cerezas que copan luego otro punto clave del turismo en la comarca. Por lo que la Mancomunidad del Valle del Jerte organiza en ambos casos un amplio programa de actividades para compartir con los visitantes, que incluyen planes de ocio en el Jerte para todos los gustos y edades y que no se limitan a una jornada, sino que va del 19 de marzo al 3 de mayo y de pueblo en pueblo. Aunque la inauguración oficial no se celebró hasta ayer, primer día de abril, en Barrado en un acto solo interrumpido por la campana de la iglesia dando la hora, una anécdota tan auténtica como la comarca entera del Jerte.
Mientras tanto, hay restaurantes donde conviene reservar para probar la gastronomía local y más de uno se llevó ayer de recuerdo su imagen en el photocall instalado en Barrado con un cerezo decorado con flores de papel realizadas por los propios vecinos. En la carretera ya se veían turistas en busca de su cerezo en flor y algunos hallaron hasta el lugar idóneo para montar un picnic con vistas excelentes al Valle del Jerte, como esta pareja de Oviedo, que prometió volver.
Publicado el 2 de abril de 2016